jueves, junio 04, 2009

Precondiciones para una ciudadanía participativa

Resulta innegable que la sociedad Chilena se enfrenta a una “crisis de apatía ciudadana” al momento de evaluar la participación ciudadana en el mundo de la política.

Tanto en lo referente a los temas de política nacional, como también en el mundo de la política a nivel local, la ciudadanía se convierte en un mero espectador, y no se convierte en lo que debiese ser: Un actor político.

Es imposible que producto de un hecho instantáneo, la ciudadanía se convierta en el actor político que en estas líneas se reclama. Sin embargo es necesario que el proceso de lograr una ciudadanía empoderada prontamente se inicie.

Pero, ¿Cómo hacer para que la ciudadanía participe?

Pues básicamente deben cumplirse dos precondiciones:

1- Interés ciudadano por informarse y participar en los temas públicos.
2- Existencia de instancia desde el Estado para que la ciudadanía participe en los temas públicos.

Ahora bien, ¿Cuál de las dos precondiciones debe cumplirse primero y cual después? O ¿es un proceso que debe ocurrir al mismo tiempo?

Me inclino por una relación causa- efecto de las precondiciones. Me explico:

Para que la ciudadanía se interese en adquirir información y participar en los temas públicos, es necesario primero que desde la autoridad se entreguen señales claras de apertura para la información y participación ciudadana.

Ya conocido el orden de las precondiciones, corresponde proponer acciones tendientes a hacer efectivo generar la existencia de instancias de participación política.

A modo de ejemplo, y con el fin de hacer mucho más tangible las propuestas, tomo como caso a tratar a la Municipalidad. ¿Qué medidas deberán tomarse para ir en el camino de la generación de instancias de participación?

1º Fomentar la información a la ciudadanía, buscando llevar la información al ciudadano. Esta entrega de información debe realizarse de forma escrita, por medios radiales y a través de Web. La información no debe limitarse a informar de los logros alcanzados, sin oque deben entregar información de decisiones tomadas o por tomar, de las comisiones que funcionan, de las decisiones en los consejos, del cumplimiento o no de las promesas electorales, Entre otra información valiosa para lograr mayor control social.

2º Entregar las tablas de los concejos municipales a la ciudadanía por lo menos un día antes de la realización del concejo municipal. Esto a través de medios radiales, escritos y por Web. Procurando que la ciudadanía sepa con antelación los temas a tratar, captando un mayor interés de estos.

3º Potenciar el “Concejo Económico Social Comunal” (CESCO), organismo representante de la sociedad civil, que además constituye un organismo asesor para el alcalde.

El potenciar, implica el adquirir mayores niveles de legitimidad frente a la ciudadanía, pues seamos francos, el ciudadano desconoce la función del CESCO, sus integrantes y sus decisiones.

El CESCO corresponde a una instancia importante de participación y representación que lamentablemente en la actualidad se subutiliza. Al respecto me referiré en extenso en una próxima ocasión.

4º Convocar a la ciudadanía para participar en procesos decisionales comunales. Por ejemplo: Realización de consultas ciudadanas, plebiscitos comunales, encuestas, entre otros.

Estos 4 puntos, que corresponden a una ejemplificación tangible de cómo generar condiciones para la participación, son sólo el comienzo de una serie de transformaciones que deben llevarse a cabo para lograr una democracia participativa y un control social.

Alvaro Jorquera Mora
Licenciado en Ciencia Política
Director Desarrollo CEPEST