Hoy en la encuesta CERC, pudimos observar el posicionamiento de Joaquín Lavín como uno de los 5 personajes políticos con más futuro en Chile. Este posicionamiento, representa la primera consecuencia en el corto plazo de una estrategia interesante de Joaquín Lavín para reingresar en la “arena política”.
No escribo para decir si lo que hace Lavín está bien o está mal, sólo quiero manifestar que con mucha intensidad está existiendo una lucha por la obtención de votos del centro político.
Los ciudadanos que se denominan pertenecer al centro político, en su mayoría se autodenominan como indecisos al momento de ser consultados por la identificación de partidos. No es de extrañar entonces que partidos políticos y posibles candidatos realicen frecuentemente guiños al codiciado centro político.
Quiero recordar 3 eventos que denomino Guiños para el centro político, ocurridos en las últimas semanas:
1- El llamado Bacheletismo aliancista, propuesto por Lavín, quien a través de ese nuevo concepto busca terminar con el aislamiento que le implica ser de un partido consolidado en la derecha. De paso aisla a Piñera y a su grupo cercano, que representan una opción mas confrontacional en las relaciones gobierno- oposición (el denominado "Desalojo")
2- El congreso Ideológico de la DC, que busca volver a re encantar a los adeptos de la Democracia cristiana (Que coincidentemente corresponden al centro político)
3- El Llamado de Iván Moreira a los desencantados de la DC. Moreira dijo que invitaba a todos los Democratacristianos que se han dado cuenta de la Izquierdización de su partido a abrazar a la oposición (alianza).
A modo de aporte final, y no tan relacionado con el tema tratado, quiero expresar lo que conversé hace algunos días con mi amigo Matías Sanhueza:
El centro político. Hoy en día (y hace ya un tiempo), tiende a acercarse con fuerza a la Democracia Cristiana al momento de votar. No resulta arriesgado decir que la Importancia de la DC radica en eso, en que es este partido el que decide el resultado de las votaciones.
Si queremos ser mas fríos, se puede decir que la democracia cristiana, probablemente nunca va a ser oposición, pues a la coalición que este partido se afilie, será la ganadora (Ceteris paribus). De ahí el poder de la DC dentro de un conglomerado.
Esa actitud pendular de la Democracia Cristiana, genera atracción en la alianza y preocupación en la Concertación. Pero esta “ventaja” por parte del Partido Demócrata Cristiano debe ser asumida con responsabilidad, tema que a veces pongo en duda al escuchar el nivel de debate dentro de la falange.
Alvaro Jorquera Mora
No escribo para decir si lo que hace Lavín está bien o está mal, sólo quiero manifestar que con mucha intensidad está existiendo una lucha por la obtención de votos del centro político.
Los ciudadanos que se denominan pertenecer al centro político, en su mayoría se autodenominan como indecisos al momento de ser consultados por la identificación de partidos. No es de extrañar entonces que partidos políticos y posibles candidatos realicen frecuentemente guiños al codiciado centro político.
Quiero recordar 3 eventos que denomino Guiños para el centro político, ocurridos en las últimas semanas:
1- El llamado Bacheletismo aliancista, propuesto por Lavín, quien a través de ese nuevo concepto busca terminar con el aislamiento que le implica ser de un partido consolidado en la derecha. De paso aisla a Piñera y a su grupo cercano, que representan una opción mas confrontacional en las relaciones gobierno- oposición (el denominado "Desalojo")
2- El congreso Ideológico de la DC, que busca volver a re encantar a los adeptos de la Democracia cristiana (Que coincidentemente corresponden al centro político)
3- El Llamado de Iván Moreira a los desencantados de la DC. Moreira dijo que invitaba a todos los Democratacristianos que se han dado cuenta de la Izquierdización de su partido a abrazar a la oposición (alianza).
A modo de aporte final, y no tan relacionado con el tema tratado, quiero expresar lo que conversé hace algunos días con mi amigo Matías Sanhueza:
El centro político. Hoy en día (y hace ya un tiempo), tiende a acercarse con fuerza a la Democracia Cristiana al momento de votar. No resulta arriesgado decir que la Importancia de la DC radica en eso, en que es este partido el que decide el resultado de las votaciones.
Si queremos ser mas fríos, se puede decir que la democracia cristiana, probablemente nunca va a ser oposición, pues a la coalición que este partido se afilie, será la ganadora (Ceteris paribus). De ahí el poder de la DC dentro de un conglomerado.
Esa actitud pendular de la Democracia Cristiana, genera atracción en la alianza y preocupación en la Concertación. Pero esta “ventaja” por parte del Partido Demócrata Cristiano debe ser asumida con responsabilidad, tema que a veces pongo en duda al escuchar el nivel de debate dentro de la falange.
Alvaro Jorquera Mora